La tos es casi siempre una indicación de irritación de las vías respiratorias de su hijo. Cuando las terminaciones nerviosas de la garganta, la tráquea o los pulmones sienten irritación, un reflejo hace que el aire sea eyectado con fuerza por las vías respiratorias.
Las toses suelen asociarse con enfermedades respiratorias tales como los resfríos o infecciones respiratorias altas, el asma, la bronquiolitis, el crup, la gripe o la neumonía. Si la tos de su hijo está acompañada de fiebre, es probable que tenga una de esas infecciones.
Cuando un niño esta resfriado la tos podría sonar húmeda (productiva o congestionada) o seca e irritante. La tos podría durar más que el goteo nasal acompañante. Si tiene tos, fiebre y dificultad para respirar (demasiado rápido, demasiado lento, con ruido, con retracción de la piel entre y alrededor de las costillas y el esternón), podría tener neumonía. Si tiene estos síntomas, consulte al pediatra inmediatamente.
A grandes rasgos, la ubicación del problema determina el sonido de la tos: una irritación en la laringe, como el crup, causa una os que suena como el ladrido de un perro o una foca. La irritación de las vías respiratorias más grandes, como la tráquea o los bronquios, es una tos más profunda y ronca.
Las alergias y las infecciones sinusales pueden causar tos crónica porque el moco gotea hacia la parte posterior de la garganta, produciendo una tos seca y difícil de detener, en particular en las noches al acostarse.
Un niño que tose solo mientras duerme podría tener asma o reflujo gastroesofágico (una afección en la que el contenido del estómago sube al esófago causando irritación y tos)
Estos son algunos de los problemas con la tos que pueden afectar a los niños:
Cualquier cosa que sea más que una tos ocasional en un bebé deberá tomarse en serio. Las causas más comunes son resfríos y bronquiolitis, que suelen mejorar en pocos días. Es importante estar atentos a los signos de dificultades respiratorias y busque atención médica si fuera necesario.
A veces los niños tosen tan fuerte que vomitan. Usualmente vomitan líquido y comida del estómago, pero también es posible que haya mucho moco, en especial durante un resfrió o un ataque de asma.
La sibilancia es un sonido agudo durante la respiración que ocurre cuando hay una obstrucción de las vías respiratorias dentro del pecho. Los niños con asma a menudo tosen y tiene sibilancias a la vez. Esto puede pasar tanto si están en actividad, jugando o por la noche. A veces su tos puede escucharse, pero la sibilancia podría ser evidente solo para el médico al auscultarlo con un estetoscopio.
La tos puede mejorar por la noche. Cuando su hijo tose de noche, podría ser por irritación en la garganta o por una infección sinusal con goteo retronasal. El asma es otro motivo principal de la tos nocturna.
La tos repentina puede desarrollarse en niños que se están asfixiando. Podría significar que algo de alimento o líquido “Se fue por el camino equivocado” acabó en los pulmones.
Un bebé menor de 2 meses de edad que tenga tos deberá ser atendido por el pediatra. En caso de bebés más grandes y niños, consulte al pediatra de inmediato si la tos:
Hace que al niño le cueste respirar.
Es dolorosa, persistente y está acompañada de fuerte silbido al respirar, vómitos o la piel se vuelve azul.
Interfiere con la alimentación y el sueño
Aparece súbitamente y está asociada con fiebre
Tratamiento
El tratamiento de la tos depende de su causa. Pero cualquiera sea la causa, siempre es buena idea administrar líquidos adicionales. Agregar humedad al aire con un humidificador de vapor fríos o un vaporizador. No obstante, asegúrese de limpiar bien el dispositivo todas las mañanas conforme al recomendado en el manual del fabricante, para que no se convierta en un caldo de cultivo para bacterias u hongos nocivos.
En algunos casos puede ser útil elevar la cabecera de un niño mayor. Si la tos nocturna se debe al asma, use un broncodilatador u otros medicamentos para el asma según se lo haya indicado su pediatra.
Comments